lunes, 27 de enero de 2020

WATCHMEN. EL PADRINO DEL HARLEM. LA MATERIA OSCURA.


HBO. WATCHMEN. EL PADRINO DEL HARLEM. LA MATERIA OSCURA. BRILLANTE FINAL PARA EL 2019.
El año 2019, acaba de terminar. Por falta de tiempo o por otras circunstancias, ha habido series de las cuales me hubiese gustado hablar un poco y no ha podido ser. Series como Chernobyl, o Love, Death and Robots, descubrimientos que me han amenizado el año. Pero en la recta final del mismo, hay que decir que la HBO ha iniciado una serie de estrenos que han brillado con luz propia, sobre todo por su calidad. No es algo novedoso, ya que las producciones de la HBO, son siempre muy buenas. Te puede gustar o no gustar la temática que toquen en cada serie en cuestión, pero su producción marca de la casa, siempre es sobresaliente. Cosa que se puede decir de estas últimas series de estreno de finales de año de la HBO, Watchmen, el padrino del Harlem y la materia oscura.
WATCHMEN. LA SERIE.
Watchmen, yo lo conocí por el comic, hace ya muchísimos años, en un arrebato, me leí tres grandes obras de Alan Moore, como V de vendetta, La liga de los hombres extraordinarios y Watchmen. Decir que Alan Moore es denso, es quedarse corto, pero es parte de su encanto en sus historias y además es un fan de Lovecraft; ya nada más que por eso me tenía ganado, pero es que el comic es una maravilla. En donde en un mundo distópico, en donde Nixón jamás dejó la casa blanca y las tensiones con el telón de acero alcanzaron cotas que nunca se llegaron a ver, en ese contexto, al borde de una guerra nuclear, donde la aniquilación es prácticamente inevitable y ambientada en los años 80, se nos cuenta que existieron y existen justicieros enmascarados, los cuales luchan como siempre por la verdad y la justicia….o no. Y entre todos ellos un ser, creado a partir de un accidente en un laboratorio, el Dr. Manhattan, capaz de moldear la materia y la energía a su antojo, en definitiva un Dios entre hombres.
En este contexto arranca el comic y la película (bastante fiel) de Watchmen, todo a raíz del asesinato del comediante, uno de los integrantes del grupo de Watchmen, que anteriormente fue también miembro de los Minutemen. Todo da como resultado una terrible conspiración para evitar el holocausto nuclear. Dado el resultado de la misma, no debería ser terrible, pero lo es, ya que para llevarla a cabo se exigirá el sacrificio de millones de personas, para salvar al resto de la humanidad. Se elige el mal menor, frente al mal mayor, y esto lo elegirá una persona.
La película nos plantea dilemas morales en ese sentido, de ¿Por qué una persona puede o debe decidir por la vida de tantos? ¿Quién le ha dado ese derecho? ¿Quién vigila a los vigilantes?, estas preguntas también se verán brillantemente reflejadas en la serie. En definitiva decir, que la aparición de una especie de calamar gigante proveniente de otra dimensión, provocará un estallido psíquico que hará realidad la gran matanza, pero que unirá al mundo como nunca antes lo había unido frente a un supuesto invasor de otra dimensión. El sacrificio esta hecho, la gran mentira montada, y las hostilidades y la posibilidad de la destrucción nuclear por parte de EEUU y la URSS, sofocada. Así acaba el comic, pero acaba con la posibilidad de que este gran engaño vea la luz en algún momento. Y ese es en parte el punto de partida de la serie secuela de la obra de Watchmen 30 años después. En la película el final que provoca esta unión mundial es distinto, pero por lo demás, es bastante fiel al comic.
Y hablando de la serie de Damon Lindelof, empiezo diciendo, que es sin duda, junto con Chernobyl, lo mejor que he visto este año en televisión. Es absolutamente brillante. Su producción, su diseño de personajes y el desarrollo de los mismos, pero sobre todo la estructura narrativa del guion de estos 10 capítulos, que a lo largo de los mismos te van montando un collage de relaciones y hechos históricos que encajarán perfectamente en uno de los finales más redondos que he visto en mi vida en televisión. Esto último puede que a alguien le chirríe, si decimos que es el mismo Lindelof de Perdidos, pero es que a mí su final me gustó y también les puedo decir que es el mismo Lindelof en plenitud de facultades que vimos, en la también grandiosa The Leftovers.
Lindelof plantea esta Watchmen desde un punto de inicio muy parecido a la historia original, ya que después de todo, ciertos secundarios en la misma, son los mismos personajes de la historia anterior; pero desde ese punto de partida se separa de la misma y monta su propia historia. Puede hacerlo, ya que han pasado 30 años, no todo tiene que ser igual que en la película o en el comic. Dicho esto, Lindelof nos ofrece una serie de eventos que ocurrieron entre la primera historia y esta, que nos permitirán adentrarnos en una nueva realidad, muy respetuosa con el original (aquí no entiendo las críticas vertidas por Moore), pero ofreciéndonos un nuevo contexto que dará pie a una nueva historia, totalmente diferente, lo cual permitirá a Lindelof, hacer lo mejor que sabe hacer, montar un guion excelente y una estructura narrativa, que en algunos de sus capítulos, es simplemente soberbia.
Esto no sería posible sin una buena construcción de personajes, pero es que eso también se da. Y aunque no son actores de primer orden que podamos reconocer, los mismos hacen un trabajo impecable. Unido todo esto a la producción de la HBO, tenemos un producto de una calidad innegable. Puede que a los profanos, al principio de la misma, no sepan muy bien ubicarse o a qué atenerse, o incluso su primera reacción sea recular. Háganme caso, sigan viéndola, sigan absorbiendo capítulo a capítulo lo que la misma les ofrece, y al final, todo cuadra. Obviamente, hablo suponiendo un mínimo conocimiento de los personajes de la historia original. Esto es lo único que se le podría achacar. Pero leer una de las mejores novelas gráficas de todos los tiempos o ver su adaptación al cine, ¿Es algo que se le pueda achacar como malo?, pues no. Así que en ese sentido nada más que decir. 
Resumiendo, Watchmen es una propuesta muy arriesgada, pero que personalmente, creo que lo borda. Aunque en un principio, no sabemos muy bien a donde nos va llevando el viaje narrativo de Lindelof, todo queda meridianamente claro al final, aunque tampoco tendremos que esperar tanto, ya que capítulo a capítulo, el escenario se va montando y sabes, desde el final del primer capítulo, que esta no va a ser una serie más, del montón. No, no lo es, es una sorpresa mayúscula. Algo totalmente distinto a lo que se está emitiendo tanto en tv como en el cine. Una pequeña joya descubierta en estos tiempos de mediocridad suprema.
EL PADRINO DEL HARLEM.
Ridley Scott, hace ya sobre unos 10 años, nos traía una fantástica película, que a mi particularmente me encanta, que es “American Ganster” con Denzel Washington y Russell Crowe.  En donde veíamos como Frank Lucas, apadrinado por Bumpy Johnson, heredaba su puesto como jefe de su organización criminal durante los años 70. Una película muy buena. Y ahora HBO, con la serie del padrino del Harlem, nos trae esta misma historia, pero en una especie de precuela. Ya que la serie se centra en la vida Bumpy Johnson y como llegó a convertirse en el padrino del Harlem, una década antes de los acontecimientos que se cuentan en la película de Scott.
Osea, estamos en los años 60 y tras una larga temporada en prisión Bumpy Johnson vuelve a casa, pero tendrá que recuperar tanto el tiempo perdido como sus antiguos negocios y socios. Enfrentándose a un brillante Vicent D`Onofrio, (que últimamente lo está bordando en cada papel que sale), jefe del cartel de los genoveses, e intentando mantener la buenas relaciones con las grandes familias sicilianas. Todo esto moviéndose en el marco de la lucha por los derechos civiles de la gente de color, que monopolizó la política en aquella época.
Esta serie a diferencia de otras de similares conceptos, como Boardwalk Empire o Los soprano, no se centra tanto en los vaivenes de la organización criminal en sí, aunque sigue teniendo sus tramas e historias centradas en ellos, sino que además se deja llevar por el ambiente social y político que monopolizaba aquella época; además de que el personaje en cuestión, interpretado magníficamente por Forest Whitaker, mantuvo relaciones y se codeo con grandes personalidades del momento. No aprovechar esas relaciones en la trama, pienso que sería un error. Gracias a Dios las aprovechan.
En estos tiempos de la administración Kennedy, veremos personajes referenciales en sus inicios, que de algún modo u otro, llegan a orbitar cerca del personaje principal, Bumpy Johnson, e incluso a ayudarse mutuamente. Hablamos de gente como Malcon X, Cassius Clay justo antes de cambiarse el nombre a Muhammad Ali, o al reverendo y congresista Powell, que fue uno de los principales valedores de la administración Kennedy. Todo esto forma un crisol de relaciones y tramas sumamente interesantes para todo aquel que le guste ver una buena historia y además basada en hechos reales.
En definitiva “El padrino del Harlem”, es un drama muy entretenido, con grandes actuaciones, y que cumple bastante bien. Hay quien le critica por ahí, que no se centre en las tramas criminales y que se deje llevar por el ambiente social y político de la época. Bien, a mí eso no me desagrada. Es más, es lo que más me gusta de esta serie. Ya que si quiero ver ficción criminal veo los Soprano, pero en este caso, además de ese ambiente, también me ha gustado muchísimo todas las referencias que se dan con todos los personajes y que permiten englobar la historia en un marco temporal determinado. En definitiva, ¿no está esto basado en hechos reales? Pues muchísimas gracias por mostrármelos, aunque muchos de ellos sean en un marco de un ambiente social, político y no criminal (que también los hay).
LA MATERIA OSCURA.
Hace ya unos años se llevó al cine la que en un principio iba a ser la primera película que adaptara la trilogía de libros de Philip Pullman, escrita entre el 95 y el 2000, y nos cuenta una historia de corte fantástico en un mundo paralelo al nuestro, en el que las personas conviven con sus propias almas, las cuales toman forma de animales y les acompañan durante el resto de su vida y que reciben el nombre de “Daimonios”. Un tipo de literatura más de corte juvenil-adulto y que por lo tanto, no se parece en nada a los libros de GRRMartin de Juego de Tronos. Porque digo esto, pues simplemente, para evitar ya malentendidos, comparar esta serie con la de Juego de tronos es un ejercicio fútil como innecesario. Ya que son historias y productos totalmente distintos.
La película que en su día se llevó al cine se llamó “La brújula dorada”, protagonizada por Nicole Kidman y Daniel Craig. Una película pasable que quizá no merecía el descalabro de taquilla que acarreo su estreno, pero que mirándolo por el lado bueno, permitió abordar el proyecto de esta trilogía literaria desde un punto de vista diferente, osea, adaptarla a la televisión en formato de serie, con la capacidad de poder desarrollar mejor sus tramas y su narrativa. Ya que uno de los fallos que tenía la película, es lo muy poco que la desarrollaban. En ese sentido la serie gana y mucho. Ya que permiten, según parece, adaptar limpiamente el primer libro, durante toda su primera temporada. Y digo según parece, ya que en este caso he tenido suerte. Es decir, es uno de los pocos casos en los cuales no me he leído los libros, con lo cual no voy tan condicionado como otras veces. Resultado, pues que estoy disfrutando mucho la historia tan increíble que cuentan en la serie, y todo me está resultado nuevo e increíble.
No sé por dónde irá la trama y eso me alegra. Ya que en ese sentido, además de una producción impecable, la materia oscura, es una serie para todos los públicos, o al menos su primera temporada, con aventuras y una oscura trama de conspiración a la cual nuestra joven protagonista Lyra, una niña, irá descubriendo y destapando poco a poco. Y es que hay muchos detalles de este mundo que se irán desvelando poco a poco a lo largo de sus capítulos, lo cual nos permitirá adaptarnos mejor a ella y a la historia que nos cuenta. Aunque claro, el primer episodio, el piloto, puede ser un poco agobiante a la hora de darnos información o de ver detalles que en un principio no comprenderemos, pero que a lo largo del desarrollo de la historia, lograremos entender y que harán que estemos más pendientes y con más ganas de ver el siguiente episodio de la serie.
Las actuaciones están muy bien, y eso que el personaje principal es una niña; la ambientación y creación de este mundo paralelo es simplemente soberbia. Ahí es donde se nota que están echando el resto del presupuesto. Y créanme, hacen bien en hacerlo, ya que la historia también es muy dependiente del mundo en el que se desarrolla. Por lo que se, de gente que se ha leído los libros, lo mejor está por llegar, y la historia se vuelve a partir de esta primera temporada, bastante más oscura. Eso si siguen las novelas al pie de la letra, que es lo que parece que han hecho con la primera novela en esta temporada de inicio en la HBO.
En definitiva, es una serie muy entretenida, que te tiene en tensión por saber cómo seguirá la historia capítulo a capítulo. Te engancha el ir viendo como poco a poco este mundo se está desarrollando ante tus propios ojos. Y su primera temporada está llena de aventuras, con unos personajes que hacen que quieras saber más de ellos. Dicen que lo mejor está por venir, así que yo estaré pendiente al estreno de su segunda temporada. Espero que Uds. lectores también. No se la pierdan, merece la pena.